Leyendo a Neruda

Resulta bastante curioso,
que leyendo El libro de las preguntas,
lo que obtienes sean respuestas
y te acabe abriendo los ojos.

No olvido

Llevaba mucho tiempo centrado en otros asuntos, sobre todo academicoprofesionales, tanto que había olvidado el sabor de los labios de esa dama que tantas alegrías daba y tantas lágrimas sacaba. En todo ese tiempo no había conseguido olvidarla, aunque bien es cierto que tampoco deseaba hacerlo, pues la quería con lo mas profundo de su ser, pero, por alguna extraña razón, no conseguía llegar a ella y ahora se sentía miedo y se escondía cada vez que notaba su presencia. Así pasaron meses, y el tiempo no perdona. Pero ella si. Ella era una amante magnífica y esperaba paciente y, cuando él supo encontrarla se dejó querer.
Había vuelto a escribir.
Había vuelto a nacer.
Había vuelto a vivir.

Es el rollo de una noche

Él quería enterrar el pasado

pero el pasado nunca muere

vive en perfecta simbiosis

porque el corazón lo prefiere

Ella quería un príncipe, 

de esos que ya no existen, 

a ser posible de cuento, 

y no un capitán Alatriste

Él quería una princesa,

experta en agricultura, 

pues quería llevarla al huerto,

a la parte mas oscura.

Se conocieron en el baile

y como dicta el protocolo mantuvieron las distancias, 

ebrios de amor por supuesto, 

y no de otras sustancias

Al final se marcharon juntos

ella le agarraba la mano, él a ella otra cosa, 

la música nadie la entendía mucho, 

pero tampoco a nadie le importa.

Sacrificio

Alguien que te echa en cara que se sacrifica por ti es que no se sacrifica por ti.